El karate es mucho más que un deporte y es que se trata de un arte marcial a través del cual se transmiten valores, disciplina y una filosofía de vida. Por esta razón, quienes comienzan a practicarlo no sólo aprenden técnicas de combate, sino que también interiorizan una serie de normas que guían su actitud dentro y fuera del dojo.
En este nuevo artículo te hablaremos de cuáles son las reglas básicas del karate, conocidas como Dojo Kun. Todas ellas rigen el comportamiento del karateka, que se regirá por valores como la humildad, el esfuerzo o el autocontrol, todas muy necesarias para practicar este deporte.

¿Qué son las Dojo Kun o reglas del karate?
En primer lugar te contaremos qué son las Dojo Kun. Este término hace referencia al código de conducta del dojo, el lugar de entrenamiento de esta disciplina. Se trata, por tanto, de un conjunto de normas, principios y reglas orientadas a guiar a los practicantes tanto en cuestión de práctica como personal.
Actualmente, estas reglas están presentes en la mayoría de estilos tradicionales de karate y, en especial, en karate-do japonés y okinawense. Aunque pueden variar ligeramente según la escuela o el estilo, hay 5 normas comunes y básicas que debes conocer.
1. Esforzarse por la perfección del carácter
「人格完成に努めること」 (Jinkaku kansei ni tsutomuru koto)
Esta primera regla del karate nos recuerda que el objetivo principal del entrenamiento no es sólo mejorar físicamente, sino también crecer como persona. El karateka debe buscar el equilibrio interior, la humildad y la mejora continua.
En consecuencia, se fomenta el autoconocimiento y la disciplina, al mismo tiempo que se invita a ser crítico con uno mismo, aprender de los errores y a desarrollar un carácter noble, justo y basado en el respeto.
De forma resumida, podemos decir que el karate no transforma únicamente el cuerpo de quien lo practica, sino que también lo hace con su carácter.
2. Ser fiel a los principios del verdadero camino
「誠の道を守ること」 (Makoto no michi wo mamoru koto)
Esta norma está relacionada con la honestidad y la integridad. Practicar karate implica actuar de forma correcta, dentro y fuera del dojo, siguiendo siempre los valores que enseña este arte marcial.
En concreto, esta disciplina rechaza la violencia injustificada o el uso de los movimientos de karate como herramienta de agresión. De igual manera, refuerza el compromiso con un camino recto y verdadero (Do), al mismo tiempo que enseña al practicante a respetar las reglas y a no buscar ventajas de forma deshonesta.
Un karateka que no sigue esta regla, aunque domine las técnicas, no representa el verdadero espíritu del karate.

3. Fomentar el espíritu de esfuerzo
「努力の精神を養うこと」 (Doryoku no seishin wo yashinau koto)
El camino en la práctica del karate no es fácil. Requiere tiempo, práctica, repetición, constancia y, sobre todo, esfuerzo personal. Esta regla promueve el trabajo duro como base para alcanzar cualquier meta, no solo dentro del arte marcial, sino también en la vida.
Lo hace educando en la resiliencia y la constancia, ayudando a comprender que el progreso llega paso a paso. Por supuesto, también pone su foco en reforzar el hábito de superarse día tras día y es que, sin esfuerzo, no hay un crecimiento real.
4. Respetar a los demás
「礼儀を重んずること」 (Reigi wo omonzuru koto)
El respeto es una de las bases más importantes del karate y de todas las artes marciales tradicionales. Se manifiesta en cada saludo, en el trato con los compañeros, con el maestro (sensei) o con los oponentes en combate.
La clave es desarrollar la empatía y el compañerismo, enseñando a tratar a los demás de forma cortés incluso en las situaciones más tensas. Además, promueve la no discriminación, ya que todos los alumnos son iguales dentro del tatami.
En definitiva, sin respeto no puede haber una verdadera práctica de este marcial y, por eso, esta regla está presente desde el primer saludo (rel) que se realiza al entrar al dojo.
5. Rechazar y contenerse ante conductas violentas
「血気の勇を戒めること」 (Kekki no yū wo imashimeru koto)
La última regla es quizás la más importante en la práctica del karate moderno y es la de nunca utilizar la violencia como primera opción. Un verdadero karateka aprende a defenderse, pero también a contenerse y evitar el conflicto si es posible.
El karate, de hecho, es considerado como una herramienta de paz ya que promueve la enseñanza del autocontrol incluso en situaciones donde exista una provocación. De esta manera, enseña a evitar peleas innecesarias y a fomentar la resolución de conflictos de forma pacífica.
De hecho, esta norma pone en valor que el verdadero valor no está en golpear, sino en tener el poder de controlar el impulso de hacerlo.

Estas 5 reglas básicas no son sólo aplicables a niños o a personas que se estén iniciando en esta disciplina. Son también vitales para los grandes maestros, que deben transmitir estas enseñanzas a los alumnos y aplicarlas cada día en los entrenamientos.
Todo esto es lo que convertirá al practicante en un verdadero karateka, siempre teniendo en cuenta que no es cuestión de memorizar, sino de interiorizar. Recuerda además que, tanto si te estás iniciando en la práctica de este arte marcial como si ya llevas tiempo en ello, en nuestra tienda online puedes encontrar los mejores uniformes y accesorios para karate.